El Consejo Superior de Deportes ha dado un ultimátum a José Luis Escañuela, presidente de la Federación de Tenis (RFET), para que colabore en las investigaciones que tiene abiertas. El CSD anunció que este jueves enviará a la sede de la RFET en Barcelona a dos funcionarios de su subdirección de Control Financiero a inspeccionar los libros y documentos oficiales. Escañuela ya negó el mes pasado las actas del nombramiento de Gala León, considerado irregular por varias territoriales, a los auditores de BDO.
El Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) debe fallar en fechas próximas sobre los dos expedientes que el CSD abrió a Escañuela y dos de sus directivos: por no aportar información sobre los 700.000 euros destinados a la Fundación y el Observatorio del Tenis español y la resistencia a una auditoría de procedimientos, y por no facilitar el libro de actas del nombramiento de Gala. Podría ser inhabilitado dos años.
Además, el CSD ha convocado a las territoriales el 30 de junio a una reunión en Madrid para informarles de la situación de la Federación.