El Arsenal está en proceso de reconstrucción tras el despido de Unai Emery, quien no lograba encontrar el camino a seguir para llevar hacia los éxitos al equipo. Con la contratación de Mikel Arteta se busca dotar al club de una nueva identidad con un nuevo estilo de juego. Esto lo sabe el nuevo técnico, quien buscará devolver al club a donde se merece aproximándose a sus jugadores e identificándose con sus causas. Su objetivo principal es recuperar para la causa a quien considera uno de los jugadores más importantes del equipo: Granit Xhaka (27 años).
«Mi primera misión será conocer mejor a los jugadores. Quiero que se apropien de la idea de atacar y de sacar a relucir el fútbol que los seguidores del Arsenal de todo el mundo quieren ver», empezó diciendo nada más quedar vinculado al conjunto inglés. «Cuando dejé el Arsenal para ir al City en 2016, y estábamos buscando un jugador para este puesto, Xhaka estaba en mi lista. Me gusta. Estaba feliz cuando el Arsenal lo reclutó porque pensé que iba a ser un jugador increíble. Hizo cosas buenas, pero hoy está enredado en esta situación que se fue pudriendo hasta que explotó», prosiguió.
«Los seguidores fueron muy positivos con él. Y él también. Por supuesto, es difícil cambiar lo que sucedió, pero estamos en el camino correcto. Hablé con él y le dije cuánto lo quería y qué esperaba de él. Y lo importante que era para el equipo. Estoy aquí para ayudarlo, quiero que sienta que estamos detrás de él. No solo yo, sino todo el club. Quiero darles confianza a los jugadores», concluyó. Solo queda ver si la afición responderá a las declaraciones del nuevo entrenador apoyando a su jugador y cerrando la herida.