Lewis Hamilton, líder del Mundial de Fórmula 1, que acabó segundo el Gran Premio de Austria, que ganó su compañero y principal rival alemán Nico Rosberg, declaró tras la carrera que éste se había "merecido la victoria" y por tanto, había que "felicitarlo". "Fue una carrera sencilla. No tuve la mejor salida. Tuve una problema con las revoluciones, ya que, aunque levantara el pie del acelerador el coche seguía revolucionado", comentó Hamilton, de 30 años, que el sábado igualó las 45 poles del alemán Sebastian Vettel, la tercera mejor marca de todos los tiempos en la Fórmula 1.
"Así que cuando solté el embrague, las ruedas patinaban y perdí terreno. Eso es algo que debemos mirar ahora, después la carrera", explicó Lewis, campeón del mundo en 2008, con McLaren, y el año pasado. "Luego, le aguanté a Nico en la primera tanda, pero en la segunda él tuvo mejor ritmo", comentó el inglés, ganador de 37 carreras en la categoría reina del automovilismo, cuatro de ellas este año: en Australia, China, Bahrain y Canadá. "Al final la cuestión era simplemente de conservar el segundo puesto hasta el final, pero Nico se mereció la victoria, así que hay que felicitarlo", manifestó Hamilton.
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