La justicia española prohibió que se disputen partidos de la Liga de fútbol (LaLiga) los días lunes y permitió que se juegue los viernes en una decisión cautelar que modifica el inicio del campeonato y puede repercutir en los ingresos por derechos televisivos.
Esto permitirá mantener el Athletic de Bilbao-FC Barcelona que inaugurará el torneo 2019-2020 el próximo viernes 16 de agosto, pero obligará a avanzar al fin de semana los dos encuentros previstos para el lunes 19 de agosto.
Así lo decidió de forma cautelar un juzgado de lo mercantil de Madrid, encargado de dirimir el litigio que enfrenta a la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) y al organizador del campeonato, LaLiga.
La federación, contraria a los partidos fuera del fin de semana, celebró la decisión, pero LaLiga anunció que presentará una apelación y que convocará una asamblea extraordinaria mañana con los clubes profesionales.
El conflicto entre ambas instituciones, fuertemente enfrentadas en los últimos tiempos, nace de la sentencia de finales de julio que prohibió la extensión de la jornada liguera a viernes y lunes.
LaLiga, que ya había programado partidos en estos días para las tres primeras jornadas de competición, recurrió a la justicia ordinaria pidiendo la suspensión cautelar de esta prohibición.
La medida es cautelar mientras un tribunal estudia el fondo de la cuestión sobre qué organismo es competente para fijar los días de los encuentros del campeonato español.
La disputa tendría como telón de fondo la repartición de los derechos televisivos del campeonato español que suponen 2.000 millones de euros.
Cancelar los partidos en lunes puede derivar en reclamaciones de los operadores televisivos, que ya habían contratado los derechos de emisión contando con los partidos entre semana, afirma LaLiga.
Aunque anunció que garantizará a los canales “diez bandas horarias diferentes, sin solapar” para los encuentros de primera división. (D)
2.000 millones
El fallo judicial comprometería la programación de las cableras que pagaron 2.000 millones de euros por los derechos televisivos del campeonato español de fútbol.