El Parma , recién vuelto a ascender a la Serie A del 'Calcio', comenzará la liga italiana con cinco unidades de penalización, tras las sospechas de intentar amañar un partido que recaen sobre uno de sus jugadores, suspendido por dos años, anunció este lunes la federación italiana de fútbol (FIGC).
En el último partido de la temporada 2017/2018 en la Serie B, el Parma obtuvo la segunda plaza de ascenso a la Serie A batiendo al Spezia 2-0, lo que le permitió adelantar al Frosinone, que empató con el Foggia (2-2).
Sólo tres años después de una bancarrota que envió al club a la Serie D (4ª división), el Parma logró un retorno triunfal a la élite, tras haber ascendido una categoría cada año.
Pero este regreso está empañado por los mensajes enviados antes del partido decisivo por el atacante Emmanuele Calaio, demandando a un excompañero del Spezia que 'levantara el pie del acelerador'.
Los aficionados de La Spezia montaron en cólera después del partido, especialmente contra Alberto Gilardino, ex internacional italiano y ex jugador del Parma, quien falló un penal lanzándolo muy por encima de la portería cuando el resultado era de 1-0 en contra.
"El tribunal considera probado que Calaio, enviando los mensajes en cuestión (...) intentó cometer un acto ilegal", indicó el comunicado de la FIGC.
El Parma anunció haber "asumido con gran amargura" esta decisión y afirmó que presentará "rápidamente" un recurso ante la Corte Federal de Apelación de la Federación italiana.
Fundado en 1913, el Parma vivió su época dorada en los años 1990 cuando el club se adjudicó dos Copas de la UEFA (1995 y 1999) y una Recopa (1993). / AFP