Con la vuelta de la Final entre Toluca y Santos, el Estadio Nemesio Diez albergará su treceava Final de Liga en Torneos cortos. A lo largo de veinte años, la Bombonera ha sido testigo de grandes momentos en estas instancias, los cuales han quedado en la memoria de la afición.
EQUIPO DE ÉPOCA
Inolvidables aquellas tardes en donde el equipo comandado por Enrique Meza, el cual tenía entre sus filas a Cardozo, Abundis, José Maria Morales, Fabián Estay y demás figuras, derrochaban su espectacular futbol a fines de la década de los 90’.
Desde ahí, se comenzó a gestar lo que sería la dinastía más grande del futbol mexicano en su época reciente, con un equipo que ganó cuatro títulos en cuatro años.
GOLPE A VILLALUZ
Una de las Finales más memorables que hayan vivido en los torneos cortos es la del Apertura 2008, en donde La Máquina y los Diablos chocaron el título del futbol mexicano.
Tras haber sacado la ventaja del duelo de Ida, disputado en el Estadio Azul, el Toluca llegaba con gran certeza y favoritismo para encarar la vuelta en el Nemesio Diez; sin embargo, Cruz Azul supo regresar y poner el 0-2 que obligó los tiempos extras.
Ya en la prórroga, una jugada polémica se dio en el área choricera, cuando en un desborde, César Villaluz penetró el costado izquierdo de la defensiva de los Diablos; cuando el volante celeste se disponía a finalizar la jugada, José Manuel Cruzalta colisionó contra el jugador de La Máquina, una jugada que tuvo que ser sancionada como penal, puesto que la falta del defensivo rojo fue más que evidente.
ROMANO REZANDO
Otro de los grandes momentos en la Bombonera es la emotividad que regaló la tanda de penales en la Final del Bicentenario 2010, jugada, igualmente, entre el Toluca y el Santos.
La ida, disputada en Torreón, arrojó un empate 2-2, mientras que la vuelta finalizó sin anotaciones tras 120 minutos.
La tanda de penales vino, misma en donde los Guerreros llegaron a ponerse con ventaja de 1-3, cuando ocurrió lo impensado. Santos tuvo tres oportunidades para anotar el tanto que le daría el título; no obstante, las fallas de Vuoso, Morales y Arce revivieron a los Diablos, quienes concretaron sus siguientes tres penales, los cuales fueron la llave de su décimo campeonato.
Sin embargo, el momento que también será recordado es el de Rubén Omar Romano, estratega de los laguneros, quien vivió un verdadero suplicio desde las bandas, al ver como el título se le fue de las manos.