Jesé Rodriguez tenía todas las cartas para ser la nueva máxima estrella del Real Madrid. Con tan solo 18 años, debutó en 2011 como delantero en el Castilla, filial del cuadro blanco, y en 2013 llegó al primer equipo con la aprobación de José Mourinho. En este último año, ya esperaba su primer hijo de Melody Santana.
El futbolista nacido en Las Palmas de Gran Canaria tenía todas las cualidades para triunfar; sin embargo, su historia se manchó por una vida descontrolada, llena de excesos, lujuria, alcohol, mujeres y hasta embarazos no deseados, así es como lo narra el diario El Mundo.
El ascenso al éxito
Por 2011, el Real Madrid veía nacer en su cantera una época dorada. Jugadores como Álvaro Morata, Dani Carvajal, Nacho, Lucas Vázquez y Jesé Rodriguez, el máximo goleador, eran dirigidos por el astro francés Zinedine Zidane, bajo las normas de conducta que este exigía. Sin embargo, Jesé era la oveja negra de este grupo.
Su mal carácter se reflejó en un partido de las juveniles cuando agredió a un árbitro con un cabezazo luego de que este lo expulsara. Por este acto, Jesé pasó 16 partidos suspendidos, todo un récord para un juvenil del Real Madrid. El equipo blanco arriesgó mucho, porque dicha agresión representa la expulsión del club según sus normas. Sin embargo, lo blindaron.
Todas sus inconductas se curaban con goles. Era muy bueno como para sacarlo del Madrid, pero seguía siendo un molesto elemento. No tuvo una vida complicada como otros jugadores que sufrieron en su niñez. Su madre es docente y su padre farmacéutico. Su hermano es un destacado miembro del Grupo de Operaciones (GEO) de la Policía de España.
Caida en picada
Su ocaso comenzó en 2014 cuando se lesionó la rodilla en un partido contra el Shalke 04 en la Champions League. Fueron casi 9 meses los que estuvo fuera de las canchas. El cuadro blanco ganó el trofeo europeo aquel año y acabó con una mala racha de 13 años sin ganarlo. Jesé celebró el triunfo como si fuera suyo desde su lecho de hospitalización. En 2016, Real Madrid ganaba su segunda ‘Champions’ y Jesé tenía un peor comportamiento. Incluso el propio Sergio Ramos tuvo que intervenir para reencauzarlo.
El españolde Gran Canaria tenía su mente en otro lado, tanto así que se puso el sobrenombre de Jey M y se dedicó al reggaetón. Incluso llegó a grabar un video con Alexis y Fido, De la Ghetto y Carlitos Rey, titulado ‘Yo sabía’. El video cuenta con más de 30 millones de vistas en YouTube.
La solución del club de Madrid fue práctica, en agosto de ese último año decidieron venderlo al PSG por 25 millones de euros. Los parisinos disfrutaron de su habilidad, pero padecieron con su irresponsabilidad. Con su novia Aurah Ruíz, llegó a París y en el primer día de arribo ella despilfarró más de 100 mil euros, por lo que Jesé tuvo que ponerle un límite de 6 mil euros semanales.
De espaldas a la familia
Su expareja Melody Santana le anunciaba el nacimiento de su segundo hijo de una manera peculiar a través de Instagram con el hashtag #telocomunico. Los franceses no aguantaron pulgas y a los cuatro meses lo cedieron al club de su tierra de origen, Las Palmas. De nada sirvió, su comportamiento se mantuvo igual.
En junio de 2017, nació su tercer hijo, el primero que tenía con Aurah. Sin embargo, Nyan, como lo bautizaron, nació con una enfermedad que lo mantiene hospitalizado desde el primer día. Jesé descuidó a su nueva familia y la joven puso fin a la relación a través de sus redes sociales.
En un mensaje de Instagram escribió: “Tu hijo sigue en el hospital, tú no lo visitas, no das nada por él. No ayudas con nada y encima vas por ahí degradándonos con tus mentiras. Has perdido la cabeza. Te has dejado llevar por todo lo malo y a la vista está”.
En agosto de 2017, Jesé llegó a la Premier League luego de que el PSG lo cesara. Su ocaso no queda ahí. Este domingo, el diario The Telegraph informó que el equipo inglés quiere devolverlo al club francés, pues ya lleva 10 días desaparecido y no ha asistido a los entrenamientos. Aún tiene 25, edad suficiente para revertir una negra historia manchada por el exceso y la irresponsabilidad. Su pueblo natal, Las Palmas, aún quiere verlo brillar como Jesé Rodriguez y borrar su personaje de Jey M.