Desencajado llegó el técnico de Liga de Quito Pablo Repetto el martes a la conferencia de prensa posterior al triunfo de su equipo sobre Guabirá de Bolivia (2-1), resultado que no le dejó satisfecho a él ni al resto del plantel.
La consigna era ganar y sacar un amplio margen de goles, de cara al juego de vuelta de este partido válido por la primera fase de la Copa Sudamericana. La revancha será el próximo 8 de mayo (16:15 de Ecuador) en Montero, Bolivia.
"Nos ganó la ansiedad y aún así merecimos el tercer gol. Nos faltó tranquilidad para resolver frente al arco", concluyó el uruguayo, sobre el partido donde el albo fue superior, mas no tuvo precisión en el remate final.
"Generamos algunas posibilidades, pero no se pudo anotar. Ellos en una jugada aislada (con una falla defensiva de por medio) no convirtieron. Luego, se aferraron al resultado porque ese gol de visita les da más posibilidades de cara al juego de vuelta", reflexionó.
El estratega contó que se fue con "un sinsabor" por haber conseguido solo mínima ventaja. "Ellos se van contentos y nosotros no", añadió, aunque después indicó que lo más importante fue haber ganado.
Visualizó el juego de vuelta. "En Bolivia ellos tendrán que salir a buscar el partido, a proponer, y si nosotros estamos capacitados saldremos adelante en esta llave", acotó.
Jugadores como Christian Cruz, José Quintero y Jefferson Orejuela también exteriorizaron su inconformidad por no haber ganado con mayor diferencia de goles. "Nos vamos con bronca porque nos llegaron una vez y nos anotaron", declaró el Chavo Cruz.
"Nos vamos con un sinsabor porque sabíamos que si nos convertían todo va ser más difícil", apuntó Orejuela, pero dejó en claro que "la llave quedó abierta". (D)