Cada cuatro años, la euforia del certamen más importante a nivel selecciones del planeta invade a los aficionados del balompié. Asimismo, se gesta una ola de mercadotecnia en torno al torneo; peluches, playeras y balones, son algunos de los productos ofrecidos en dicha época.
El álbum Panini del Mundial, es otro ejemplo de los artículos ofrecidos en el mercado en vísperas de la Copa del Mundo. Los fanáticos invierten tiempo y dinero para completar todas las estampas disponibles.
Para el Mundial de Rusia 2018, el álbum está conformado por 682 cromos, más 9 de edición especial. Cada sobre cuesta 14 pesos, mientras que el libro se vende en distintas versiones: de 55 pesos con cinco sobres, de 29 pesos con dos sobres, y una edición de pasta dura que aún se desconoce el precio y la fecha exacta de venta.
En su afán de llenar su álbum de Panini, las personas organizan eventos, a través de las redes sociales, para intercambiar sus imágenes repetidas; los cuales, ayudan "muchísimo; tanto en el de Sudáfrica, como en el de Brasil, ya había quienes organizaban eventos vía Facebook" expresó para La Afición Lourdes de Luna, una apasionada coleccionista del mencionado producto.
Estas reuniones, señaló, "la misma gente es quien las realiza", y se ocupan para conseguir los cromos más difíciles de encontrar: los hologramas, los estadios, los emblemas de las ciudades sede y las conmemorativas de leyendas del futbol.
"Mi expectativa era que Neymar, Cristiano Ronaldo o Messi, fueran difíciles de conseguir, pero no, las tengo hasta repetidas" enfatizó De Luna; quien, además, sentenció que la popularidad de los jugadores no influye en la transacción: "podrías cambiar a Cristiano (Ronaldo) por un chino que ni conoces".
Algunas personas se dedican a vender las estampas, mismas que oscilan en precio de entre 10 y 30 pesos. Tras adquirir en su totalidad las estampas del álbum, no se recibe ningún tipo de compensación, "es el puro gusto de juntarlo" concluyó Lourdes.
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