En 2014, Batista regresó a la WWE luego de cuatro años de ausencia. Aunque esperó tener el mismo respaldo, el excampeón mundial reapareció en un momento en el que los fanáticos de la empresa apoyaban a Daniel Bryan.
A pesar de que ganó el Royal Rumble, Batista no fue de los preferidos de los fanáticos; por el contrario, se ganó la antipatía del público. Por eso, se vio obligado a ceder su oportunidad de ganar el título de WWE a Daniel Bryan en WrestleMania 30.
Todo eso conllevó que su segundo paso por WWE dure seis meses. Desde su salida, Batista siempre se mostró interesado en volver al menos una última vez antes de retirarse. Y así poder meterse de lleno en su carrera como actor.
Sin embargo, la WWE no ha mostrado intención de que regrese como luchador, sino como miembro del Salón de la Fama. Aunque es un halago, Batista lo ha rechazado porque considera que aún puede dar más en la lucha libre.
"No he aceptado mi nominación al Salón de la Fama porque creo que mi carrera aún no ha terminado. Siento que tengo mucho por ofrecer. Y me encantaría volver a la WWE por última vez", dijo Batista, quien ganó seis veces el título mundial.