El Cruz Azul tendrá sus últimos cuatro partidos en el Estadio Azul, un recinto que dejará de ser su casa para el siguiente torneo, pues será demolido, y aunque este hecho debería ser un envión para que el equipo se despidiera de buena forma, no lo han podido lograr, ya que aunado a los malos resultados, los cementeros no logrado ganar de local en lo que va de este Clausura 2018.
Previo al encuentro de esta tarde contra Pachuca, los celestes suma ocho puntos; producto de una victoria, cinco empates y cuatro derrotas. En sus últimos encuentros en el Azul se enfrentarán ante Pachuca esta tarde, luego a Pumas, Lobos BUAP y Monarcas.
ÚLTIMOS CUATRO PARTIDOS EN CASA
Los cierres de torneo para este conjunto no son muy alentadores, ya que el pasado Apertura 2017 tuvo un 50 por ciento de efectividad ganadora, pues venció 2-1 a Santos, perdió 3-1 ante América, fue derrotado por Tigres y ganó 1-0 a Veracruz por lo que sumó solo seis de 12 puntos posibles.
Para el Clausura 2017, no entró a la fiesta grande debido a que solo obtuvo 21 puntos y se quedó en el decimoprimero de la general; en aquel torneo venció 2-0 a los extintos Jaguares de Chiapas, igualó 0-0 ante Tigres, empató ante Morelia y le ganó 2-1 a Chivas.
Y para el Apertura 2016 la situación fue muy similar, ganó 5-3 a Veracruz, perdió 2-1 ante Puebla, venció 2-1 a los Tuzos del Pachuca y fue derrotado 3-2 por León.
En aquel certamen tampoco clasificó a la fiesta grande, pues solo sumó 19 puntos y quedó en la decimocuarta posición.
Asimismo, hace dos años, La Máquina tampoco tuvo un gran cierre, debido a que de los últimos cuatro encuentros que tuvo en casa, solo rescató dos puntos de los 12 posibles. Mientras que para el Apertura 2015, obtuvo tres unidades en las últimas fechas de local.
Lejos de haber algo alentador para los seguidores del Cruz Azul, los números son negativos en casa para los cierres del torneo, por lo que los elementos dirigidos por Pedro Caixinha deberán revertir esta situación y tratar de mejorar su situación en la actual campaña, pues de lo contrario sería una despedida grisácea para uno de los inmuebles más icónicos de la Ciudad de México.