El entrenador argentino Miguel Angel Russo deberá continuar internado “tres o cuatro días más” debido a una infección urinaria por la que debió ser ingresado a una clínica de Bogotá el martes.
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A raíz de la internación, Russo no pudo estar presente en el encuentro de su equipo, Millonarios, frente a Atlético Nacional por la ida de la Superliga, la final que se juega entre los dos últimos campeones del certamen colombiano.
En el banco lo reemplazó su ayudante de campo Hugo Gottardi. El encuentro ante el conjunto de Jorge Almirón finalizó 0-0 y la semana próxima se jugará la revancha en Medellín.
Más allá de lo deportivo, el entrenador debe priorizar su recuperación. Luego de que le detectaran cáncer de próstata, fue operado de la vejiga en setiembre de 2017 y nuevamente el 2 de enero en Argentina para completar el protocolo del duro tratamiento.
''Es una persona consciente e inteligente y sabe poner las cosas en su lugar. Siempre lo acompaña un espíritu de certeza de que las cosas van a salir bien. Es realmente admirable, con espíritu batallador y sus creencias de como se debe vivir la vida'', declaró su médico personal Carlos Castro a ESPN consultado sobre esta nueva internación, ahora por una infección urinaria.
Según aclaró, el entrenador continuará “tres o cuatro días más internado en observación” pero fuera de peligro.
“Amaneció muy bien y optimista. Se internó por cuestión de responsabilidad, ante todo la salud'', agregó el médico.
Desde Millonarios informaron en un comunicado oficial que la internación por infección urinaria no tiene relación con la operación a la que se sometió Russo en enero para combatir el cáncer.
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Russo, exitoso entrenador argentino de 61 años, se ganó el cariño de los hinchas de Millonarios al conseguir a fines de 2017 el 15to título del club en la liga local.
Este lunes, su regreso a la actividad fue a pura emoción cuando el DT no pudo contener las lágrimas al agradecer el cariño recibido y confesar el delicado momento de salud que tiene que atravesar.
"Todos en el club sabían lo que me pasaba y me respetaron muchísimo. El silencio es bueno. Estoy muy agradecido con los directivos, mis jugadores, la gente, con Carlos Castro, que fue mi oncólogo y trabajó con la gente en Buenos Aires, Juan Ignacio Caicedo y también agradecido con los oncólogos de la Clínica del Country, que me dieron mucho amor. Esto se cura con amor”, dijo emocionado el ex DT de Rosario Central, Vélez, San Lorenzo, Boca, Estudiantes y Lanús, entre muchas instituciones del fútbol argentino.