Llegó Pione Sisto en 2016 al Celta de Vigo como recambio de Nolito, una apuesta desconocida de 6 M€ que pronto se afincó en la banda izquierda del equipo de Eduardo Berizzo. Desde allí marcó la temporada pasada 8 goles en 50 partidos, ya que su escuadra llegó a semifinales de la Europa League y la Copa del Rey y por tanto pudo disputar muchos encuentros.
El joven jugador pronto llamó la atención por su velocidad, verticalidad y su capacidad para aparecer en los momentos más oportunos ayudando a su escuadra. Se ganó un sitio en el corazón de los aficionados de Balaídos con su entrega, y esta campaña sus prestaciones han aumentado.
Suma 5 goles en 18 partidos entre Liga y Copa, si bien es en el torneo de la regularidad donde está mostrando su mejor versión, especialmente como asistente. Suma 10 pases decisivos en 17 partidos, de forma que está siendo determinante en muchos de los resultados positivos obtenidos por su club.
Ha sido esta escuadra la única que hasta la fecha ha sacado algo positivo del Camp Nou (empate a 2 el pasado 2 de diciembre). Y mientras tanto, el valor del futbolista se ha triplicado, ya que según Transfermarkt ha pasado de 5 M€ nada menos que a 15 M€ del mes de junio a la actualidad.
A buen seguro que va a protagonizar muchas informaciones que lo colocarán lejos del conjunto olívico próximamente, y podría ser una venta importante de la entidad gallega en un futuro no muy lejano.