Grzegorz Krychowiak llegaba al PSG en 2016 después de haber firmado una gran temporada en el Sevilla y tras el pago por parte del club francés de alrededor de 30 M€. Había brillado con el cuadro hispalense en los dos cursos en los que estuvo, y tenía una gran proyección como uno de los mejores mediocentros de Europa.
Los andaluces conquistaron esas dos temporadas la Europa League y llegaron en la última a la final de la Copa del Rey, donde cayeron ante el FC Barcelona en la prórroga. Por eso, cuando el combinado del Parque de los Príncipes apostó por él tras la llegada de Unai Emery, parecía un gran fichaje del club galo.
Sin embargo, la temporada pasada pasó sin pena ni gloria para el polaco, que apenas pudo participar en 21 encuentros con el mismo entrenador con el que anteriormente había brillado. De manera que fue cedido en verano al West Bromwich Albion, donde tampoco ha podido remontar el vuelo.
Suma 14 partidos, en los que no ha brillado, y además el club de los baggies tiene previsto devolverlo en este mercado de invierno a París, mientras el club francés le buscará una salida, a ser posible una venta. Una situación totalmente insospechada hace solamente año y medio…