El fútbol es -entre otras cosas- un negocio; una verdad bastante obvia. En el 2017 lo reflejó con particular crudeza. Fichajes por cifras exorbitantes, competiciones nuevas o con mayor cantidad de equipos y un calendario cada vez más comprimido dieron forma a un año en el que se cruzaron límites impensados.
El traspaso de Neymar al PSG por 222 millones de euros fue uno de los ejemplos más contundentes de lo anterior, aunque fue apenas la punta del iceberg de una tendencia generalizada. Otro fichaje hecho por el cuadro de París fue el de Kylian Mbappé, el PSG desembolsará en 2018 unos 180 millones de euros en una maniobra dilatada para evitar incumplir las reglas del ‘fair play’ financiero.
El siguiente fue el de Ousmane Dembélé, jugador que apenas completó una temporada de alto nivel en el Borussia Dortmund, el Barcelona pagó 105 millones más otros 42 en extras. Atrás quedaron los casi 100 millones de euros pagados por Gareth Bale por el Real Madrid o los 105 que el Manchester United puso por Paul Pogba, cifras que en su momento parecían una locura y que hoy no asustan a nadie.
En el 2017 se batieron récords en Inglaterra, Italia, Alemania y Francia. Según Transfermarkt, la Premier League lideró el ranking de desembolsos con mil 400 millones de libras. El Manchester City, por ejemplo, pagó al Mónaco unas 52 millones de libras por Benjamin Mendy, récord para un defensor. La presión de los clubes europeos para que se sancione a equipos como el PSG o el Manchester City, sin embargo, no parece haber surtido efecto alguno.
Asimismo la inflación del mercado tiene su correspondencia en el crecimiento de las cláusulas de rescisión. El Real Madrid fijó en mil millones de euros el precio de salida de Cristiano Ronaldo y de Karim Benzema. Por otra parte, el Barcelona puso a Lionel Messi del Barcelona en 700 millones de euros.
EL MUNDIAL Y AL AUMENTO DE PARTICIPANTES
Los entes rectores del fútbol europeo y mundial también tuvieron un año de grandes dividendos económicos. La ampliación de participantes de la Copa del Mundo, de 32 a 48 selecciones a partir de 2026, fue la gran novedad deportiva del año para una FIFA que no termina de pasar página de los escándalos de corrupción.
A su vez, Estados Unidos, Canadá y México, con su inédita candidatura triple, se perfilan para recibir la cita dentro de nueve años y Argentina, Uruguay y Paraguay sueñan con el 2030. La UEFA tiene a su Eurocopa de 2020 que se jugará en 12 países, aunque antes experimentará con la nueva Liga de Naciones que se disputará en 2018 y 2019.
Los clubes y las Ligas se quejan de las ventanas internacionales, pero tampoco escapan a la tendencia. La Premier League, por primera vez, comenzó una temporada un viernes por la noche, un nuevo horario con la emisora concesionada para trasmitir sus juegos; la Bundesliga tendrá en 2018 por primera vez partidos los lunes.