Juventus sabía que era el momento de dejar un mensaje. En la despedida del año ante su gente, en un estadio repleto y en un clásico ante la Roma. Horas después de que el líder Napoli había ganado y seguía firme arriba, el equipo de Massimiliano Allegri dejó en claro que le discutirá el título hasta el final: se impuso por 1-0 -aunque con sufrimiento- y se mantiene como escolta a un punto, tras 18 fechas. Gonzalo Higuaín fue titular en el local (Paulo Dybala permaneció en el banco), mientras que Federico Fazio y Diego Perotti jugaron los 90 minutos en la visita.
Juventus fue mejor en el primer tiempo y logró abrir el marcador a los 18 a través de Medhi Benatia. Tras un córner desde la izquierda, Giorgio Chiellini ganó en el área de cabeza, el arquero Allison Becker dio rebote, Benatia remató de zurda y dio en el travesaño, pero tuvo la fortuna de convertir en el segundo rebote. Al final, ese gol, sería definitivo para el partido.
Paulo Dybala, abrigado en el banco de suplentes. AFP
En el complemento, Higuaín tuvo la más clara tras una pared con Sami Khedira: quedó mano a mano, pero llegó exigido y definió por encima del travesaño. Después, Juventus reculó y Roma se le fue encima por el empate.
La visita contó con tres situaciones claras de gol en los últimos diez minutos del partido. La primera con un remate de Alessandro Florenzi que dio en el travesaño, la segunda con un cabezazo por el segundo palo del defensor que desvió el arquero Wojciech Szczesny y la última de Patrick Schick que inexplicablemente se filtró solo entre los centrales y corrió 20 metros para enfrentar al arquero, que le ganó en el mano a mano, le ahogó el grito y salvó el triunfo de la Juventus.
Ahora los de Massimiliano Allegri suman 44 puntos y quedaron a uno del único líder, Napoli, que más temprano había derrotado 3-2 a Sampdoria y cosecha 45. Más atrás quedaron Inter, con 40; y Roma, con 38.