Emelec conquistó este domingo su cuarto título de entre los últimos cinco años, pero el que acaba de conseguir es el que más trabajo le ha costado lograrlo en la presente década. ¿Por qué?
Revisando sus estadísticas podemos observar que en este año, de 44 fechas apenas estuvo sólo en seis jornadas como puntero (fue líder por primera vez recién el 22 de octubre en la fecha 15). Y desde entonces tuvo que extremar su rendimiento, para que en los siguientes 41 días pueda mantenerse en el liderato, y lo consiguió. Las otras cinco veces que estuvo al frente en la tabla de posiciones fue justo en la parte final de la segunda etapa, lo que le sirvió para poder ganar esa fase y así disputar el título de campeón ante Delfín. Contrario a lo que ocurrió en 2013, 2014 y 2015, en donde los azules fueron líderes durante 35, 15 y 8 fechas, respectivamente.
En la primera etapa de 2017 su rendimiento fue del 57,57%, muy por debajo de los porcentajes que alcanzara en las primeras fases de cuando fue tricampeón (68,18% en 2013 y 2015, y 66,67% en 2014). Y aunque este año llegó en segundo puesto detrás del Delfín, necesitaba superar mucho ese rendimiento de la etapa inicial para ganar la segunda fase, la que finalmente cerró con un 68,18%.
Además, aunque en 2017 perdió menos juegos en la primera etapa (sólo dos) respecto a la fase inicial de los años en los que logró su tricampeonato (5 derrotas en 2013, 4 en 2014 y 3 en 2015); sin embargo en este año en la etapa inicial la mitad de sus partidos (11) terminaron con un empate, consiguiendo sólo nueve triunfos, cifra mucho menor a las 14 victorias alcanzadas en 2013, y a las 13 de 2014 y 2015 logradas en la fase inicial.
Por ello tuvo que mejorar mucho su rendimiento en la segunda etapa para poder primero alcanzar y luego superar al Delfín (ganador de la primera fase), que incluso llegó hasta a liderar la tabla de posiciones durante doce jornadas de la segunda etapa.
Si tomamos en cuenta los resultados obtenidos en las dos etapas y en la final, de sus últimos cuatro títulos, en 2017 Emelec alcanzó un rendimiento del 64,49%, que es menor al conseguido durante su tricampeonato, donde en cada uno de esos tres años, por coincidencia, llegó al 66,67%; siendo estos sus años de mejor rendimiento hasta ahora en el siglo XXI.
Emelec termina este año con 25 triunfos (incluidos los juegos de la final), uno menos que en 2013 y 2015, y tres menos que en 2014. Al único equipo al que le ganó los cuatro encuentros de ambas etapas fue a Fuerza Amarilla, mientras que quedó invicto ante Deportivo Cuenca, Liga de Quito, Guayaquil City y Clan Juvenil. De los equipos que en la tabla acumulada quedaron en los seis últimos lugares sólo no pudo quedar invicto ante Universidad Católica.
En goles la producción de Emelec en 2017 (con 77 tantos) fue menor a la que alcanzó en 2014 (79) y 2015 (86), sus dos anteriores títulos. A los que más anotaciones les marcó en la reciente temporada regular, sin contabilizar la final, fueron Clan Juvenil (11) y Liga de Quito (9), y al que menos goles le anotó fue a Guayaquil City (4). Su máximo goleador este año, incluyendo los encuentros de la final, fue Ayrton Preciado (14), y otros quince jugadores azules también anotaron al menos un gol en esta temporada.
En el campeonato de este año su valla fue batida en 43 ocasiones (incluyendo la final), mientras que cuando ganó su tricampeonato estuvo mejor defensivamente: en 2013 (30 en contra), 2014 (37) y 2015 (39). Los equipos que más goles le hicieron entre las dos etapas fueron: Delfín, Macará y Universidad Católica, con seis cada uno; mientras que el que nunca pudo vencer la portería azul fue Fuerza Amarilla.
A continuación, un cuadro con la cantidad de goles que Emelec marcó y recibió de cada uno de los otros once equipos que participaron en el campeonato ecuatoriano de la serie A en 2017. (D)
