El partido ante el Astana del pasado jueves supuso el estreno europeo de uno de los nuevos talentos de la cantera del Villarreal, el centrocampista Dani Raba. El cántabro, de 22 años, partió como titular ante el cuadro kazajo y además de firmar un partido notable fue el encargado de anotar el primer tanto de su escuadra, el que dio pie a la remontada y garantizó la presencia del submarino amarillo en la siguiente ronda de la Europa League.
Su presencia en el once inicial vino a confirmar una tendencia que comenzó a intuirse tras el desembarco de Javi Calleja en el primer equipo. El hasta ese momento preparador del filial se hizo con las riendas del conjunto tras la precipitada destitución de Fran Escribá y desde el principio optó por dar mayor protagonismo a los jugadores formados en las categorías inferiores. De hecho, junto a Raba han gozado de minutos en estos últimos meses el arquero Ander Cantero (22 años), el central Pau Torrres (20), el mediapunta Chuca (20), el mediocentro Ramiro Guerra (20) y el atacante argentino Leonardo Suárez (21).
Por si fuera poco, baja la batuta de Calleja se ha producido la definitiva eclosión del que es, sin duda, el gran valedor del buen trabajo que viene realizando el equipo en la formación de futbolistas, el centrocampista Rodri Hernández (21 años). Aunque Escribá ya tiró de él en multitud de ocasiones, ha sido el actual técnico quien le ha entregado los galones y la ha encomendado la misión de ir garantizando la sucesión del ahora lesionado Bruno Soriano.
Aunque en los últimos tiempos también ha tirado de talonario para cerrar fichajes no siempre acertados (basta con recordar los casos de Enes Ünal y, en especial, Rubén Semedo), lo cierto es que con el impulso dado por Calleja, la cantera vuelve a recuperar el protagonismo que siempre tuvo en un equipo del que en los últimos años han salido los aún integrantes de la plantilla Soriano; Manu Trigueros o Mario Gaspar y otros talentos como Moi Gómez, Matías Nahuel o Alfonso Pedraza.