Después de intentar cerrar la llegada de un nuevo central durante el pasado verano (uno de los grandes nombres propios que estuvo en el punto de mira fue el del jugador de la Real Sociedad Iñigo Martínez), el entrenador del FC Barcelona, Ernesto Valverde, insiste en la necesidad de sumar un zaguero a sus filas.
Y es que el entrenador extremo teme que una ausencia más prolongada de lo normal para cualquiera de sus dos teóricos titulares (Gerard Piqué, Samuel Umititi) debido a una lesión pueda ser un hándicap difícil de superar. Pese a que no se duda de Javier Mascherano se considera que no es suficiente, mientras todo apunta que Thomas Vermaelen se marchará en enero en busca de minutos con vistas al próximo Mundial.
Uno de los grandes nombres propios de los que se ha venido hablando es el del colombiano Yerry Mina (22 años), futbolista del Palmeiras cuyo fichaje está cerrado y podría incorporarse ya el mes de enero. Sin embargo, Valverde duda. El entrenador considera que el zaguero podría tener problemas en partidos importantes y no está adaptado al fútbol europeo. Otro nombre propio es el de Matthijs de Ligt, aunque en este caso habrá que esperar hasta el próximo verano para trabajar en su fichaje desde el Ajax.
De este modo, el FC Barcelona pondrá toda la carne en el asador durante el próximo mes de enero con el claro objetivo de satisfacer las demandas