El pasado domingo, la afición del Inter de Milán dedicó una buena ración de pitos a Antonio Candreva. El futbolista, que no termina de ofrecer el rendimiento esperado en este arranque de curso, fue retirado del campo en torno al minuto 60 de juego y la grada castigó su falta de acierto con una de esas despedidas que resultan difíciles de digerir.
Por si fuera poco, uno de los jugadores que podría amenazar su puesto, el galo Yann Karamoh sí que aprovechó los apenas 20 minutos que le brindó Luciano Spalletti para hacer justo lo que se le pide al transalpino: desbordar por el costado derecho y participar activamente en las jugadas de ataque.
En Italia, varios medios ya dejan claro que si el internacional no espabila y da un paso al frente en los próximos choques es muy factible que comience a perder protagonismo y acabe relegado a un segundo plano que podría poner incluso en peligro su presencia en las convocatorias de la Selección de Italia absoluta.
Curiosamente, esta delicada situación podría terminar beneficiando a un tercero, el Chelsea. Su técnico, el también transalpino Antonio Conte, es un declarado admirado del futbolista y, tal y como recoge CalcioMercato.com, podría plantearse nuevamente su fichaje si observa que Candreva ha perdido fuerza en el Inter y comienza a valorar nuevos horizontes.