El panorama no puede estar peor en La Primavera. Sin gol, sin un equipo titular, con derrotas en casa y fuera y con el Jalisco jugando más en contra que a favor. Los Leones Negros de la Universidad de Guadalajara pasan por una crisis de resultados y de identidad. Pasó un tercio del torneo y los Leones no pueden ganar y no se ve cómo. De último momento llegaron dos refuerzos, pero parece que no es la medicina necesaria para una enfermedad, que a simple vista parece más que una simple gripe.
Los números aplastan al Vikingo Dávalos como un piano y es que de seis partidos suman cuatro derrotas, en fila en los primeros cuatro juegos del torneo y dos empates, y en el goleó tres a favor por 10 en contra, tras firmar estos números no es novedoso que el equipo sea el colero general. Bastante lejos de los punteros, de los equipos que buscan el regreso a la Liga MX.
Los Melenudos suman dos derrotas en casa, han jugado tres partidos en el Jalisco y sólo tiene una unidad tras empatarle a los Alebrijes de Oaxaca.
Los Leones carecen de solvencia deportiva, el puesto de portero ya fue de Florencio Morán y ahora juega Felipe López, quien va por su cuarto partido como profesional. En la media cancha falta talento y en la delantera Ismael Valadéz no puede sólo.
De hecho los tres goles de los universitarios ninguno ha sido de Valadéz, los goleadores son Adrián Villalobos, Manuel Madrid y Luis Nieves.
Con estos números el equipo de la UdeG no puede salir del sótano y ahora esperará que este receso por fecha FIFA pueda servirles para ajustar tuercas para la jornada siete cuando se midan al FC Juárez.
Para el Apertura 2015 los Leones sumaron ocho unidades, dos triunfos, dos empates, y dos derrotas, nada mal para el equipo melenudo. Lo mejor en ese semestre fue la goleada al Corre con doblete de Anangonó.
En el Clausura 2016 los de La Primavera arrancaron con cinco triunfos y una derrota, 15 unidades y el lideratoy el boleto a la Liguilla de manera temprana. Lo mejor fueron Los once goles que marcaron, aunque lo cierto no les alcanzó para mucho en la Liguilla.
Para el Apertura 2016 el conjunto que ahora dirige el Capi Dávalos ganó un partido, empató tres y perdió dos, seis puntos y nueve goles a favor, las unidades necesarias para dar la pelea, aunque lo cierto es que de la mano del Tiburón Sánchez tampoco trascendieron en las finales.
En el Clausura 2017 el Equipo que Nació Grande ganó tres duelos, empató uno y perdió dos encuentros, fueron cuatro goles a favor, pero que dieron muchos dividendos, 10 puntos en total.
Ahora el presente es muy negro, no hay un plantel para pelearle a los punteros y los juveniles no han estado a la altura de la historia de los Melenudos. Dos puntos de 18 son nada para un equipo que hace años le peleaba el cariño de sus fans a Chivas y Atlas.