La primera edición del Abierto de Los Cabos en 2016 tuvo como sede la escuela Delmar, que este año repite como el hogar del torneo de tenis; sin embargo, el objetivo desde que se presentó el proyecto del certamen era tener una casa propia, como ocurre en Acapulco, y ya se están dando los primeros pasos para ello.
El plan es similar al del Puerto, con las canchas del evento a solo unos metros del hotel en el que se hospeden los jugadores, para que las distancias que recorran sean cortas, y tengan mayor comodidad.
"El hotel Solaz lo abriremos en diciembre del 2017, y para el próximo año dará el hospedaje, además tenemos un terreno de 260 hectáreas y parte de la primera fase que queremos desarrollar es el estadio, y vamos a llevar todo ahí, a construir instalaciones, para que todo esté a 200 o 300 metros; ya hay un túnel construido para llevar a los jugadores del hotel a la cancha, y el plan es que en el 2019, o en el 2020, el torneo ya se juegue ahí, y alrededor de esto vamos a tener un centro deportivo de alto rendimiento, y un área comercial, para que no sea solo eso, sino que toda el área tenga entretenimiento", explicó Carlos Escoboza, director comercial de Solaz.
Una de las cuestiones a resolver es si se trasladará el estadio que hoy se ubica en Delmar a la nueva sede, o si se construirá un nuevo inmueble para el hogar permanente. "Todavía estamos en pláticas de qué va a pasar ahí, en dos o tres semanas ya se define el tema, pero el objetivo es hacerlo lo mejor que podamos, y darle a la gente no solo la experiencia del tenis, sino la más completa", agregó.
Uno de los sellos del torneo de Acapulco es que los jugadores pueden incluso caminar de su habitación a las canchas del tenis, y tener cerca la playa, modelo que podría replicarse para el ATP 250 en Baja California Sur.
"La idea es que ellos no tengan que salir del complejo, que estén ahí mismo, en el Spa y de ahí al juego, en carritos de golf, y alrededor que tengan todo, para no salir del lugar".
Otra de las metas de esta nueva sede es no quedarse solo con el Abierto de Los Cabos, sino tener actividades durante todo el año, para aprovechar la construcción del estadio.
"Tenemos que usarlo durante las otras 51 semanas del año, estamos viendo con el centro deportivo de alto rendimiento, si se pueden hacer campamentos de verano, para hacer algún entrenamiento, estamos viendo qué eventos podemos hacer, y será una realidad dentro de unos años", concluyó.