Alos 24 años, el español Marc Márquez es la cara del motociclismo a nivel mundial. Su meteórica y exitosa carrera le ha dado al deporte un nuevo dominador, tras los años de hegemonía del italiano Valentino Rossi, quien de ser su ídolo, se convirtió en su mayor rival.
Después de quemar etapas a gran velocidad, campeón en 125cc en 2010, en Moto 2, dos años más tarde, y coronarse en MotoGP en su temporada de debut, 2013, ha conquistado tres de los últimos cuatro títulos en la máxima categoría de la competencia de dos ruedas.
A bordo de la máquina de Repsol-Honda, busca su segundo bicampeonato en esta temporada, que no comenzó con el éxito esperado, pero que poco a poco lo regresa a la pelea por el título, de cara a la presentación en Le Mans este domingo.
El español habló con La Afición y mostró su felicidad por la posibilidad que MotoGP aterrice en México a corto plazo, para brindar un espectáculo diferente al público nacional.
"Sería un placer tener un Gran Premio en México, así añadiríamos un país más al campeonato, lo que siempre es positivo, y estoy seguro que habría un ambiente muy bueno, porque en las carreras de Austin (Estados Unidos) y Argentina siempre hay aficionados mexicanos que viajan para vernos".
Justo en Austin, apenas el 23 de abril, Márquez consiguió su primera victoria de la temporada, después de un cuarto lugar en Qatar y un retiro en Argentina, lo que lo metió de lleno en la lucha con Rossi y su compatriota Maverick Viñales, ambos de Yamaha.
"Austin siempre ha sido un circuito bueno para mí (cinco triunfos en cinco carreras) y ganar ahí y lograr el primer triunfo del año me dio motivación y confianza, para seguir luchando por el título, aunque al final se reparten los mismos puntos en todas las carreras", explicó.
El español de Honda tiene 58 puntos al llegar a Francia, dos menos que Viñales y a cuatro de Rossi, por lo que conseguir el cuarto título en cinco temporadas, es una opción real para Marc: "creo que es posible, pero tenemos que seguir trabajando duro para conseguirlo".
Sin embargo, la pelea no será sencilla, porque además de Rossi y Viñales en la disputa también aparece su compañero de equipo, Dani Pedrosa, quien se impuso en la prueba de España hace dos semanas.
"La competencia será muy alta, cada año las marcas y los pilotos mejoran y si quieres ganar, tienes que progresar, dar lo mejor de ti y trabajar a tope con el equipo, si haces todo esto y estás a un gran nivel, tienes más opciones de luchar por el título", confió la estrella del serial.
DEJA SU HUELLA
Ese deseo por ganar ha sido la marca del nacido en Cervera, desde que apareció en Moto GP, y a los 20 años y en su temporada de novato, se llevó el campeonato, para hacer historia en la categoría, un legado que ha aumentado ya a tres títulos.
"Intento no pensar en ello, estoy muy contento con lo que he conseguido hasta ahora, y después de cada campeonato hay algún momento en que me pasa por la cabeza, pero prefiero no pensar en ello; enseguida me concentro en la siguiente temporada y en lo que tengo qué hacer para ser campeón al año siguiente".
Pero entre esos tres campeonatos en MotoGP, Márquez reconoce que el más reciente fue el más complicado, por la presión que puso en todo momento Rossi, quien había sido segundo en 2015, cuando otro español, Jorge Lorenzo, se llevó el trofeo de la máxima categoría.
"Fue el campeonato más luchado de todos los que he conseguido y me sirvió para quitarme el mal sabor de boca que me dejó el año previo, durante la pretemporada sufrimos mucho con la moto y llegué a pesar que sería imposible ganar, pero trabajamos duro para sumar puntos en las primeras carreras y a medida que avanzó la campaña conseguimos una moto más competitiva, que al final nos permitió lograr el objetivo", concluyó.