Después de una temporada de altibajos en la que aún tiene la oportunidad de alzarse con un doblete pero ha mostrado notables carencias y un nivel alejado del de pasadas temporadas, llega el momento para que el FC Barcelona piense en el futuro. Así, aunque aún no ha confirmado la identidad del que será su entrenador, el equipo de la ciudad condal baraja un buen número de nombres propios en forma de posibles fichajes.
Una de las grandes prioridades es el internacional italiano Marco Verratti, anhelo de la dirección deportiva para mejorar la medular barcelonista. Sin embargo, la importancia que tiene el transalpino en el Paris Saint Germain, así como el notable número de clubes interesados, complica mucho esta posibilidad y dispararía el coste de la operación.
Precisamente por este motivo, otros nombres propios aparecen en escena. Uno de los que ha surgido hace unas semanas es el del africano Jean Mickaël Seri. Una de las revelaciones de la Ligue 1 debido al rendimiento que ha ofrecido en la medular del Niza. Y parece que el jugador está muy por la labor de vestir de azulgrana. Así lo ha confirmado en una entrevista concedida a Mundo Deportivo donde ha señalado que «Mire, yo soy del Barça desde que era un niño, cuando estaba aún en mi país natal, en Costa de Marfil. Siempre fui muy ‘culé’, quienes me conocen lo saben. Luego cuando fui a jugar a Portugal aún tuve la oportunidad de seguir más de cerca sus partidos». Además, el costamarfileño (33 partidos disputados este curso) señala que «Me han comentado que técnicos del club barcelonista han venido a ver nuestros partidos».
Con un contrato hasta junio de 2018 y una cláusula de rescisión cifrada en 40 M€, el jugador es claro al reconocer que «Es que si el Barça te viene a buscar, no puedes decirle que no. De ninguna manera», por lo que ahora se encuentra en el tejado de un FC Barcelona que deberá valorar si lanzarse o no por el fichaje este mismo mercado estival.