Es primero de mayo, suena el pitazo inicial y el balón comienza a rodar en el corazón de La Victoria. La avenida Parinacochas por un momento deja de ser esa calle congestionada para convertirse en el escenario de la fiesta popular más grande del fulbito: el Mundialito de El Porvenir. Los barrios más bravos de Lima tienen claro que el fútbol no solo se restringe en lo que pasa en un estadio o lo que se ve en televisión. Para ellos la calle es la cuna del deporte rey donde las futuros Messi y Cristiano Ronaldo dan sus primeros pasos. Por este campeonato pasaron futbolistas como Hugo Sotil, Samuel Eugenio, entre otros.
► Real Madrid vs. Atlético: la emotiva portada de "Marca"
La edición número 67 volvió más recargada que nunca. En total fueron 56 equipos que participaron de este torneo. Antes de llegar a jugar en la pista de Parinacochas, se disputan durante tres domingos una eliminación directa entre todos. Al final quedan 14 escuadras y se agregan dos más: el campeón de la edición pasada y el ganador de un campeonato que se realiza antes del Mundialito.
A diferencia de otros torneos, aquí se puede ganar por faltas y tiros de esquina si es que los partidos quedan empatados. Si en todo quedan igualados se van al lanzamiento de moneda. Así se decidió un finalista. Solo en la final estas reglas no cuentan. En el tiempo extra, esas reglas vuelven para conocer al campeón.
Purito Barrios Altos a la final del Mundialito de El Porvenir. pic.twitter.com/90zvi9HHhG
— Victor Garay Luna (@victor_galu) 1 de mayo de 2017
En el Porvenir se reúnen los mejores exponentes del futbol calle, del futsal y hasta ex jugadores de Primera División. Aquí las estrellas terminan estrellados porque para ganar no hay que jugar bien sino resistir y meter más que los demás.
Todas esas características la tuvo el equipo Purito Barrios Altos que llegó a su tercera final en toda su historia y esta vez logró ganarla. En la final empató 1 a 1 ante Confecciones Yorely y en el tiempo extra gracias un tiro de esquina a favor logró coronarse como campeón. Así llegó a su fin el torneo donde solo los valientes y lo más bravos se atreven a participar.