La vida de un canterano no se termina cuando tiene que abandonar el equipo en el que ha desarrollado toda su carrera. De hecho, en la mayoría de ocasiones resulta indispensable dejar el club de origen para poder impulsar una carrera que de otro modo podría quedar avocada al estancamiento.
El último ejemplo de este proceso lo encontramos en Michael Keane. El zaguero parecía destinado a convertirse en uno de los líderes defensivos del Manchester United, pero tras superar tres cesiones (en Leicester City, Derby County y Blackburn Rovers) y acumular apenas 3 partidos con la primera plantilla optó por desvincularse del cuadro de Old Trafford e iniciar una nueva aventura en el Burnley.
Tres temporadas después, ya puede decirse sin miedo a equivocarse que el central acertó de pleno. Y es que, además de para convertirse en uno de los pilares defensivos de los clarets, este periodo le ha servido para experimentar una progresión que le ha abierto las puertas de la Selección de Inglaterra absoluta (suma 2 partidos) y le ha impulsado en la agenda de los grandes conjuntos de la Premier League.
Según cuenta The Telegraph, a día de hoy, hasta cuatro equipos de la máxima categoría estarían dispuestos a pelear por un defensa que viene destacando por su capacidad de anticipación, su buen manejo de balón y su versatilidad. Curiosamente, entre los pretendientes, junto a Liverpool, Everton y Tottenham, también figura el United, el mismo equipo que no tuvo la paciencia oportuna para esperar su definitivo despegue...