Rafael Jaime Jaramillo está a unos días de comenzar la hazaña de ser el primer corredor ciego en cruzar el Desierto de Sahara, 250 kilómetros sobre arena que serán un gran reto para él y que sin miedo alguno está dispuesto a lograr.
El triatleta mexicano ya viajó rumbo a su primer destino, Bélgica; después partirá hacia París, donde se reunirá con Nahila Hernández, quien lo acompañará en esta travesía como su guía, para llegar juntos a su última parada, Marruecos, lugar en el que se realizará el Maratón des Sables.
"Ella ya está en París y nos estaremos viendo el 7 de abril en el aeropuerto; ella también ya está muy entusiasmada, los dos estamos en el proceso de recover y de descanso y, pues, afinar ya los últimos detalles de estrategia de carrera cuando nos veamos", dijo Rafa a La Afición.
Antes de su viaje a Bélgica, Rafa dijo que se sentía "ansioso, un poco de nervios, pero creo que los necesarios porque sé a lo que me estoy aventurado, ha sido un sueño que he venido trabajando de hace un par de años, desde que yo me inicié en esto del running, la verdad es que ya quiero estar por allá, en el viejo continente, preparar mis últimas cosas y estar escuchando ese balazo de arranque".
Jaime Jaramillo concluyó su entrenamiento en el Desierto de Atacama, en Chile y en su natal Durango, donde aprovechó las altas temperaturas, pues correrá en un clima similar.
El Maratón des Sables comenzará el próximo 9 de abril. A pesar de llevar ese nombre, se trata de "una carrera de ultradistancia, es una carrera multidía y de autosuficiencia, esto quiere decir que se van a correr durante cinco días, cinco etapas diferentes; las distancias pueden variar un poco, la suma final son 250 kilómetros, en promedio son 42 kilómetros diarios, salvo el cuarto día, porque son 84 kilómetros corriendo", explicó.
El corredor mexicano dijo que la organización sólo les proporciona cierta cantidad de agua a lo largo de este trayecto, la cual es a "temperatura ambiente, caliente; mientras nosotros en una mochila que llevamos sobre la espalda tenemos que llevar nuestros alimentos no perecederos, vamos a usar liofilizados, que son como la comida de los astronautas".
Esta travesía implica también que serán seis o siete días en los que los competidores no podrán bañarse, aunque las condiciones sean de 45 a 50 grados centígrados, y "conforme van pasando los días, a pesar de que llevamos menos peso en la mochila, se vuelve más duro".
Rafa está más que seguro de que "nos vamos a convertir, no solamente mexicano, en el primer ciego del mundo del Maratón des Sables. Ya una persona había corrido el Maratón, pero era un ciego parcial; es decir, un débil visual".
El 'runner' de Durango dejó un mensaje para todas las personas que no enfrentan sus miedos ni cumplen sus metas.
"Preguntarles que si Rafa Jaime, que supuestamente está limitado por estar ciego, no puede ser competitivo ante los demás, si Rafa Jaime pudo hacer esto, a los demás, ¿cuál es el pretexto o qué les duele?", afirmó.