La mudanza de los Raiders a Las Vegas no fue una noticia que agradara a sus aficionados en Oakland.
A pesar de que Mark Davis, dueño de la franquicia, quiere mantener al equipo en la ciudad en lo que el nuevo inmueble es construido, medios estadunidenses informan que el conjunto considera a San Antonio como una sede temporal, en caso de que los ‘Malosos’ no pudieran jugar en la ciudad californiana por diversas razones o que el nuevo estadio no esté terminado para cuando culmine el contrato con el O.CO Coliseum, su actual casa.
La idea toma fuerza si se considera que, tras dar el anuncio de la mudanza, Davis señaló que no tiene problemas en devolver los abonos de la temporada por la decepción de que el equipo se vaya, además de que el directivo visitó la ciudad varias veces cuando buscaba posibles lugares para volverla la nueva casa del equipo.